Angela Melim: Día más día menos. Versión: Teresa Arijón y Bárbara Belloc

Día más día menos. Poesía reunida 1974/2017, de Angela Melim, Buenos Aires, pato-en-la-cara, 2019
Traducción: Teresa Arijón y Bárbara Belloc

Selección para op.cit.: Valeria Cervero


De O Vidro O Nome (1974)

Jundú

Metida
en el jundú
enmarañado.
Los gajos lento
se desatan.
Nudos
envuelta
en lianas.
Lerda corto
cuerdas y lazos.
Abro claros
vareo el matorral.
Laberinto.
Pero el jundú va a dar a mar abierto
traidor atrayente
contiene el infinito.


De Das tripas coraçao (1978)

Cosas así pardas

Para Eduardo

Jilguero, pato, alboroto
cosas así, nombres — Rita
cosas así, pardas, mestizas
de pequeño porte
cosas de fibra
aunque de aspecto desvalido
cosas pardas vivas
pulsantes
un poema así.

*

La preocupación política por el destino del país.
Leo en el diario
estudiantes Belo Horizonte
todas las veces lloro.
Todo acto ni desacto es político
y la poesía no murió en portugués.
“Ay,
qué vida apretada”
bordaron en el repasador de cocina
………………………..repasador de cocina
………………………..repasador de cocina
………………………..trapo de piso
………………………..bolsa de pan
………………………..bolsa de gatos
………………………..cama
………………………………………calle
…………………………………………………..sin salida.
Y después huida.
¿Disco es cultura o es clase?
Diversión estrola Sistema (¡)
–estrolemus–
de toda casta
no economizo no
pienso en el futuro no
subo en la vida cuando doy
el culo
PARATODOS
lamento entonces
que sigan
sin saberlo
(él no telefoneó telefoneo yo)
esto-aquello, imaginate, hablar, va a dar que
van a decir
la pura verdad
mueve el culo, bien, y mueve bien
la ambrosía
recaliente y/o manjar de los dioses
Dios es amor
canta en la cocina
“ó pé de anjo ó pé de anjo pé de anjo rezador tem um pé
tao grande ó pé de anjo”
sólo quiero pequeños
placeres
cenicero de caracol –design brasileño
agua de colonia Regina
y grandes
tenés una pija tan grande, ángel
nunca vi otra igual.


De As mulheres gostam muito

I

SOBRE EL SUICIDIO. TENGO QUE DECIDIR entre piedra o vidrio, astilla o esquirla, porque todas las palabras no caben en un libro.

PIEDRA. Brillante, en forma de corazón.

(Que Dios la tenga –un hilito de alma hecho humo escurriéndose, ¡había que ver la caída! Un cuerpo no se despedaza cuando cae, los fragmentos de adentro ni con la muerte aparecen.

–Tenía que ver, en la orilla del mar, que le cortaron las patas al cangrejo para que no huyera, el esfuerzo de la carcasa retorciéndose.

El rebañito curioso y sufridor, antes de ir al trabajo –el color que más se ve es el rojo, pantalón, vestido, camisa.)

“Desnudo corazón
de Copacabana
te deseo como deseo
…………………………………saltar
del piso once
un vidriecito de color
se astilla
………………..cuando cae: brillante rojo automóvil

me aprieta en la mano
hace trizas mi
deseo/como/vos
…………………………..morir.”

(El portero subió a tomar café y contó todo. Ella no tenía treinta años.)


DeVale o escrito (1981)

La forma de la boca es la alegría

La forma de la boca es la alegría
De adentro viene el aire limpio, el alma y la claridad
Los cuerpos tienen olor
La montaña azul
El pasto.


El mar no existe

El mar
no existe, sólo
lo imposible y la ausencia,
la acidez,
se reproduce.
La acidez es un fuego que come el tubo oscuro que atraviesa el cuerpo.


De Fogos juninos (1984)

Fogos juninos

Como un cheiro do céu, na muda noite
Errava da ipoméia da montanha
A peregrina essência delicada.”
Alberto de Oliveira

Primero el perfume
del jazmín.
Entrelazo.
Trepa, alcanza altura, se esparce en el aire y toma el mundo
y da
esencia
placer.
Ah, manzana
la seducción.
Firmes, transparentes granos entre dientes
prestos a estallar
sangre viva
penosamente contenida
en burbujas en la granada.
Entonces
las flores de mi campo
verde
minado.
Cada paso ansia el suelo
lo cierto en el suelo
la humedad buena, fría
que nos hace
hace las frutas
la casa que es el suelo.
Pero de cada paso salta una explosión
un tiro
lluvia de lágrima.
Sonrisa es grito
Lacerante
ojo es agujero, derrama llanto
o sequedad
oído violado, tímpano roto
brazos cortados, cabezas.
Ahí incendios, tropel
allá silencio
montaña de cadáver.
Fuego, humo.
Arriba el cielo azul y limpio.
Aquí, tan amado, tan bonito
el niño abre las manos
extiende el presente
en las palmas
sobre las líneas de la vida
orgulloso, satisfecho
serio:
granadas.
El futuro son granadas.
Vos sos niño
súplica
de refilón que inclina
de abajo para arriba
dice
–(me aprueba)
quiero ser feliz.


De Poemas (1987)

Corajudo como la belleza

Incluso a la sombra que hace tu falta
me queda un sol
pequeño
entibiar mías sólo mías también pequeñas
flores delicadas
mías sólo mías
sólo

por eso puedo
ofrecer–

heme aquí
plantada firme
y audaz.

Hace tiempo que la guerra comenzó –oigo
los disparos roncos
siento DOLOR
de bala que atraviesa
el fino cristal
pero la fe no siente susto
es grande el futuro y glorioso: apuntan
ojos que confían
y estruendos.

Y la nostalgia, que no golpea
para entrar
(cómo se explica)
que invade
como creciente arrasa
el precario cantero
del pecho.
Deseo
de piel que sólo uno calma
deseo que impele
amor tan alto.

Misión, misil en vuelo recto –oso
partir el aire en dos.
La guerra comenzó hace tiempo
el corazón
combate alucinado
al ritmo mortal de su belleza siempre nueva
se arroja
en su coraje.


De Mais dia menos dia. Poemas reunidos 1974-1996 (1996)

Día más día menos

Ella hacía versos rimando guiones
–tipo ojalá-que-caiga azul-marino–
pero me dijo que no sabía dónde terminaba el poema.
Un día de estos
dependiendo de la luz
transformado en perfume un haz me atraviesa
(o rayo de otra cosa –montaña antigua, pez,
……………………………..que es hilo
……………………………..o madeja, idea)
y la medalla lo frena
–Nuestra Señora de Loreto
santa protectora de los aviadores–
en el pecho
punto exacto
que desata un río
falso lecho blando
hojas descompuestas
en polvorientas nubes submarinas
templado arriba
abajo frío.
Ahí se puede morir, es fácil –una campana
fina, un doblar de campanas
un cerro verde
lo que no tengo
todo el aire del mundo.
Se empieza a morir y un día se termina.


De Possibilidades (2006)

Clowns

Será triste el cruce
a la Tierra Sin Sentimientos
del capital total.
Uno a uno
por el desfiladero
como los muchachitos del cine.
Fardos, burros.
¿Camellos?
También, venidos de otras películas.
Turbantes, sarongs, saris.
Hermano, primo.
Padre.
Hasta la madre por el despeñadero.
No quedará nada.
Amor, sonrisa.
Piedra sobre piedra.
Sólo frialdad y niebla.
No, no será triste.
Es Sin Sentimientos la Tierra
del capital fatal.
Oveja irreal
Simulacro de balido
Inteligencia transgénica.
Clowns, clones –¿será gente
lo que baja por la garganta
del otro lado de la montaña
de la transmutación global?


Punto neurálgico

El arte y la literatura no pueden separarse de la vida,
enmascarados de apoliticismo.
S. Fediúkin

Estoy aquí
en el centro
en el nervio inflamado
de la ciudad maravillosa.
Aquel lugar abandonado
herido
de los locos
de los mendigos
blancos y negros
cubiertos de hollín.
Estoy aquí sufriendo
con ellos
sin poder
por las mías
cambiar la suerte.
En el pasaje
hacia lugares buenos
con brisa y aire acondicionado
en el pasaje a otras ciudades
de barrios arbolados
clubes con piscina
quinchos con parrillas.
Un caserío descolorido
–lindo, nuestro pasado–
escalera derruida
ventana sin persiana
faltan dientes
basura
pozos en la vereda.
No existe Poder
Público.
Sólo Abuso.
Estoy aquí con ellos
moribundos
del nuevo tipo
del tipo que no quiere vivir más.
Y como yo
muchos escriben.
Anotaciones sin fin
en cuadernos con renglones
que los estudiantes descartaron
en los tachos de basura.
Esos que el verano
hace bajar calle abajo
con la lluvia
porque las alcantarillas están tapadas
el pueblo es maleducado
y no hay administración.
El nuevo año
padres
o madres solteras
abuelos todavía amorosos
no podrán pagar con tarjeta
durante todo el año
el nuevo material escolar
los mismos que antes hacían las fiestas de los niños
con litros y litros de gaseosa.
Hoy no llegan
al alquiler
del mes
de la pieza de pensión
azul
turquesa
ni pueden comprar
en la Central
de vidrieras desparramadas por el suelo
zapatillas y pantalones de gimnasia…
¿Quién más dejará de reír
se unirá a María la Juntabolsas
cargando pertenencias preciosas
bolsas de botellas vacías de plástico?
¿quién más responderá con puteadas
a los insultos?
–porque hay gente
que viste ropa recién lavada
y planchada
gente que tiene casa
familia
y el tupé de provocar a esa mujer…
Y qué dura que es–
hace cuántos años está en la calle
sin protección
ni una pizca de amor.
Por más fuertes que seamos,
¡qué desamparados estamos todos!
Un pan francés cuesta cuarenta centavos
la maravilla lacera
además de ser testigos
y dejarlo asentado,
los que no estamos de acuerdo
los que sufrimos
¿qué haremos?



Links

Más poemas. En UNAM / Otra Iglesia…
Entrevista en Buenos Aires. En Revista Ñ, por Mario Nosotti